El día 22 de enero de 2024 celebrábamos el 3er aniversario de la entrada en vigor del Tratado para la Prohibición de las Armas Nucleares (TPAN). El TPAN fue aprobado en una votación, el 7 de julio de 2017, por la Asamblea General de las Naciones Unidas y tras lograr la 50ª ratificación, por Honduras, el 24 de octubre de 2020, entró en vigor el 22 de enero de 2021. A fecha de hoy, lo han ratificado 70 países. No ha sido un camino fácil, desde años atrás se venia impulsando por la sociedad civil la aprobación de este Tratado. La conferencia que condujo al Tratado fue boicoteada por todos los Estados del arma nuclear, así como por todos los miembros de la OTAN excepto Países Bajos, que votó contra.
Este Tratado ayuda a «estigmatizar» las armas nucleares, como ocurre con las armas químicas, las biológicas, las municiones en racimo o las minas terrestres antipersona, y servir como un «catalizador» para su eliminación. Alrededor de dos tercios de las naciones del mundo se han comprometido a trabajar conjuntamente «para llenar la brecha legal» en el actual régimen internacional de armas nucleares, y considerar el TPAN como una opción para alcanzar este objetivo. No es un tratado para la no proliferación sino para la eliminación
El Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares, es un acuerdo internacional jurídicamente vinculante para prohibir las armas nucleares, con miras a su eliminación total, y desde el 22 de enero de 2021, las armas nucleares son ilegales, de acuerdo con el ordenamiento jurídico internacional. Una victoria de un pequeño David ante los monstruos Goliath.
Detrás de este logro está la “Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares (ICAN)” cuyo trabajo recibió el Premio Nobel de la Paz en el año 2017. Justicia y Paz España forma parte de ella y además está adherida a la Alianza por el Desarme Nuclear.
Al cumplir el TPAN su tercer aniversario, desde la Alianza para el Desarme Nuclear, se organizó el primer encuentro online: Webinar “Armas Nucleares: una amenaza para la humanidad y el planeta” en el que se profundizó en la amenaza global y existencial que supone la presencia de más de 12.500 armas nucleares en el mundo.
Intervinieron Carlos Umaña, copresidente de IPPNW y miembro de la Junta Directiva de ICAN; Carme Suñé, presidenta de Fundipau y Tica Font, investigadora del Centre Delàs d’Estudis per la Pau. La conversación fué moderada por Maribel Hernández, coordinadora de la Alianza.
Tras la visión de un breve video titulado el “Principio del fin de las armas nucleares” que encuadró el tema abordado, la moderadora fue haciendo diversas preguntas a la Mesa de manera alternativa, logrando un espacio dinámico y ameno.
Un objetivo presente: El aniversario del TPAN es un buen momento para conocer la historia y los hitos que marcaron la aprobación de este histórico tratado y reflexionar conjuntamente sobre el lugar en el que nos encontramos a día de hoy, tres años después de que entrara en vigor.
Carlos Umaña, en un primer momento, respondió a la pregunta sobre el problema nuclear y lo que implica la existencia en el mundo de este tipo de armas, y las consecuencias y peligros reales de desastre nuclear, incluso hasta por cuestiones de cálculos erróneos, accidentes involuntarios o fenómenos naturales. Tica Font abordó el tema de las razones para preocuparnos, que los resume en 5 factores. Carme Suñé presentó el recorrido histórico desde los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki, hasta la actualidad.
Así:
- Debemos tomar conciencia del momento de amenaza nuclear y sobre las consecuencias de una guerra nuclear, porque el riesgo real está presente en un contexto de tensión bélica. No se nos escapa la actualidad de una guerra de muchos frentes y a plazos, que se está viviendo. Guerras donde están especialmente implicados los países que tienen más armas nucleares.
- Los factores de preocupación responden a: 1. La retórica de los discursos que utilizan las grandes potencias sobre la posibilidad del uso de estas armas; 2. La aprobación por la OTAN, en el año 2022, del concepto de las armas nucleares como elemento de disuasión en un momento de grandes tensiones. La disuasión como estrategia de seguridad es algo en lo que debemos centrarnos en desmontar; 3. El retroceso y cierre de puntos de diálogo entre las dos grandes potencias que después de la Guerra Fría sí llevaron a tratados bilaterales para reducción de arsenal nuclear y violación de esos Tratados; 4. El reemplazo de armamento nuclear por parte de EEUU en los países europeos donde tiene ubicadas armas nucleares; 5. Responde al peligro que supone la modernización y grandes inversiones de armas nucleares en los nueve países poseedores de estas armas nucleares. Realmente estamos en una situación más peligrosa que la de hace 30/40 años atrás
- Pero ante ello, tenemos una herramienta que antes no existía y es el TPAN; es el primer instrumento internacional para avanzar no sólo en el desarme, sino que entre otros elementos, tiene en cuenta a las víctimas de las armas nucleares, y aborda sus graves consecuencias humanitarias y medioambientales, así como una mirada al tema de género por considerar que son las mujeres las más perjudicadas pero también las que pueden aportar más salidas a la carrera de armamentos, también la nuclear. Un Tratado que pone en el centro la seguridad de la humanidad.
Una convicción emergía en el webinar: Seguir buscando estrategias para lograr que el Gobierno de España se adhiera y firme el TPAN y con ello abrir una significativa “brecha” en la disciplina de la OTAN expresaban:
- “Es hora de que España se ubique en el lado correcto de la historia. No existe ningún obstáculo legal ni compromiso internacional que lo impida, y la inmensa mayoría de la población, hasta el 80%, está a favor de que España se sume al TPAN. Si España, con sus valores de cultura democrática y europeístas no puede firmar, ¿entonces quien puede hacerlo?”
- “España debe ser un ejemplo de compromiso con la Paz y el derecho internacional y apostar también por la eliminación total de estas armas adhiriéndose al TPAN”.
- “Las entidades locales tienen mucho que decir en el camino hacia el desarme nuclear. Actualmente, más de 8.000 ciudades en el mundo, incluyendo algunas capitales, han aprobado mociones en apoyo al TPAN”
- Trabajar y fomentar la cultura de educación por la paz. Por el cuidado de la vida y el planeta y por la preocupación por el cambio climático debemos decir no a las armas nucleares. La historia del futuro nos pasará cuentas
- Informarse y unirse a la Alianza. La Alianza, creada en Mayo de 2023, es una red que nace para unir a entidades y organizaciones españolas con el fin de lograr la adhesión del Gobierno de España al Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares (TPAN). Y ya somos más de 55 organizaciones.
- En Justicia y Paz tenemos activa la campaña de apoyo de la Iglesia Católica al TPAN, con mas de 50 adhesiones de obispos, organizaciones de Iglesia, parroquias, órdenes religiosas, etc, con el compromiso de trabajar por la eliminación de las armas nucleares. Te puedes apuntar y adherir aquí.