Sri Lanka pasa a ser Estado Parte y Bahamas firma el Tratado de Prohibición de las Armas Nucleares en una ceremonia celebrada en la sede de Naciones Unidas en Nueva York
Casi la mitad de los países del mundo han firmado ya el histórico Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares (TPAN) tras una ceremonia celebrada este martes 19 de septiembre en el marco de la reunión de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York. En ella, Sri Lanka ha pasado a ser Estado Parte del Tratado y Bahamas lo ha firmado.
Tras estas dos adhesiones son ya 93 países los que han firmado y 69 los que han ratificado este instrumento jurídico internacional que prohíbe las armas nucleares y toda actividad relacionada con ellas. Tras su negociación y aprobación en 2017, el TPAN entró en vigor en enero de 2021. Es el primer acuerdo multilateral que prohíbe las armas nucleares de manera integral y establece un marco para su eliminación, así como para la asistencia a las víctimas de su uso y ensayo y la reparación del medio ambiente.
Para Melissa Parke, directora ejecutiva de ICAN, “el creciente apoyo al TPAN brinda una autoridad añadida a lo que ya es la norma internacional más fuerte contra las peores armas de destrucción masiva. Esto es muy necesario en este momento en que la guerra en Ucrania y la escalada de tensiones en la península de Corea llevan al mundo a estar más cerca de una guerra nuclear que en cualquier otro momento desde el apogeo de la Guerra Fría”.
Según Parke, cualquier uso de armas nucleares “supondría una catástrofe humanitaria y medioambiental sin parangón por lo que estos dos países deben ser elogiados por poner de su parte para evitar que estas horribles armas vuelvan a utilizarse en un conflicto”.
Una lección para España
Para las organizaciones que forman parte de la Alianza por el Desarme Nuclear, el compromiso mostrado por Sri Lanka y Bahamas debería servir de estímulo para que también el gobierno español decida dar un paso al frente y materializar de una vez por todas su compromiso con el desarme nuclear firmando el TPAN. Sería una lástima desaprovechar la oportunidad que supone la presidencia de la Unión Europea para liderar en el continente el inicio del cambio de posicionamiento respecto al armamento más devastador e indiscriminado que existe.
Con la firma de Bahamas, la adhesión al TPAN por parte de los Estados caribeños es ya prácticamente universal. La adhesión de Sri Lanka, por su parte, envía un importante mensajes a sus vecinos del sur de Asia, India y Pakistán, poseedores de armas nucleares.